El Informe ‘Accesibilidad y movilidad: mejorando la calidad de vida de las personas con discapacidad’, elaborado por la Fundación Mutua de Propietarios, que analiza la accesibilidad tanto en el interior como en el exterior de la vivienda, asegura que un 87% de los edificios de viviendas debe realizar actuaciones de eliminación de barreras arquitectónicas para mejorar su accesibilidad. En concreto, un 17% necesita instalar un ascensor; el 22% una rampa para salvar el escalón de acceso al portal; el 56% tiene porteros automáticos no accesibles desde una silla de ruedas; 2 de cada 3 tienen sus buzones elevados y el 48% de los portales necesita un abrepuertas motorizado porque ésta pesa demasiado.
Este documento también confirma que dos de cada diez personas con movilidad reducida han tenido que cambiar de casa por falta de accesibilidad. Añade que el 58% de los españoles ve poco o nada probable que se lleven a cabo mejoras de accesibilidad en su edificio, ya sea por motivos económicos (55%) o por la falta de acuerdo entre los vecinos (47%).
Esta situación tiene graves consecuencias: un 42% de las personas con dificultades para moverse pase muchos días sin salir de casa, y un 4% no salga nunca. En este sentido, el 33% de los españoles considera que si su edificio estuviera más adaptado saldría más de casa, un porcentaje que se duplica en el caso de aquellos edificios que no tienen ascensor.
Según este informe, llevar a cabo acciones para mejorar la accesibilidad supondría un coste medio por hogar de 1.361€, una cifra que se incrementa en aquellos edificios de menos plantas y menos vecinos, con 5.409€ y 4.457€ respectivamente; entre los hogares de edificios más antiguos (3.156€); en los que tienen viviendas de menor tamaño (2.416€) y en los hogares con menos ingresos (2.995€). Pese a que el 63% de los españoles está de acuerdo en que un edificio accesible revaloriza sus inmuebles, 6 de cada 10 ve poco o nada probable realizar las mejoras de accesibilidad que se necesitan. A esto se suma que muchas de las viviendas no accesibles son propiedad de personas con bajos recursos, por lo que se evidencia la necesidad de que administración e instituciones contribuyan a hacer posible que se lleven a cabo actuaciones para la eliminación de barreras arquitectónicas.
2024, un año para avanzar en accesibilidad
La Fundación Mutua Propietarios está firmemente comprometida con la accesibilidad para las personas con discapacidad o movilidad reducida y dedican muchos esfuerzos a sensibilizar a la sociedad acerca de la relevancia de suprimir obstáculos arquitectónicos, así como de adaptar las viviendas, comunidades de propietarios y sus entornos con el propósito de garantizar que ninguna persona quede excluida de acceder a su vivienda.
Durante el presente ejercicio va a centrar sus esfuerzos en luchar por mejorar la accesibilidad en los edificios de viviendas para personas con discapacidad, para crear una sociedad inclusiva y diversa. Desarrollar una buena accesibilidad a la vivienda genera un efecto beneficioso en la salud y bienestar de los individuos, al asegurar la confortabilidad y la protección a la hora de realizar todas aquellas actividades rutinarias en la vida de cualquier persona: entrar y salir de su vivienda, subir, bajar, desplazarse por las zonas comunes de su comunidad, etc.
