Investigadores de las universidades de Cambridge y Columbia diseñan un modelo futurista de «ascensor a la Luna»
Los ascensores también están inmersos en la carrera espacial. Parece una idea sacada de una novela de ciencia ficción, pero en realidad se trata de un proyecto de una megaconstrucción que permitiría escapar de la fuerza de la gravedad de una forma más económica y sencilla.
Después de muchas propuestas poco realizables, dos investigadores de las universidades de Cambridge (Reino Unido) y Columbia (EE.UU.) han presentado recientemente una nueva propuesta de ascensor espacial que, afirman, ya es «viable con la actual tecnología». El proyecto desarrollado por Zephyr Penoyre y Emily Sandford se ha bautizado con el nombre de de «Spaceline» («Cable espacial»). La iniciativa propone «anclar» en la Luna un cable que llegue hasta la zona de gravedad de la Tierra.
Los investigadores consideran que el cable tendría que ser tremendamente estrecho en sus extremos, para no colapsar por causa de la presión gravitacional, pero más ancho en el centro para evitar la rotura.
Pero también necesitaría ensancharse en el centro, para prevenir su rotura.
Y, gracias a este, en lugar de generar un impulso lo suficientemente fuerte para salir de la órbita terrestre, los astronautas solo tendrían que llegar al extremo inferior del Cable Espacial.
Según la revista Futurism, una vez ahí «la nave espacial se aferraría a un transbordador alimentado por energía solar que subiría por el cable». «El cable sería en una pieza de infraestructura muy parecida a los primeros ferrocarriles: el transporte de personas y suministros sería mucho más sencillo y fácil que un típico viaje espacial», le explicó Penoyre a la publicación.
Futuro próximo
La viabilidad de la idea de un ascensor espacial, sin embargo, fue ratificada este año por la Academia Internacional de Astronáutica (AIA) en un reporte especial sobre el tema. En «El camino a la era del ascensor espacial» la AIA también afirma que la posibilidad de fabricación a gran escala de grafenos de cristal único (más resistentes incluso que los nanotubos de carbono) hace que su eventual construcción esté más cerca de lo que muchos piensan.
En esta línea, China quiere crear el primer ascensor espacial de la historia en 2043. El fabricante de cohetes más importante de Asia quiere usar un mega cable de 750 toneladas que llegue a una primera estación espacial. De ahí, el ascensor viajaría como si fuera un cohete hasta una segunda base. Y después se descolgaría con otro cable hasta llegar a la Luna.
Si el proyecto sale adelante, dentro de 22 años se podría viajar a la Luna directo desde la Tierra. El objetivo de China es utilizar este ascensor como lanzadera de todo tipo de viajes espaciales, para misiones tripuladas y para transporte de mercancías.