“Gracias al apoyo de empresas como Serki hemos podido asumir el reto de una competición profesional tan exigente”

¿De dónde nació su afición al ciclismo?

Mi padre fue un apasionado del ciclismo toda la vida y procuró transmitirle ese entusiasmo a sus hermanos, que fueron tres ciclistas, y a mí, que he sido quien ha seguido con la afición familiar.

¿Cómo ha sido la evolución de su carrera en este duro deporte?

Empecé en la escuela que formó en Crevillente la firma Pikolinos, en la categoría de cadete, utilizando bicicleta de carretera, que era lo habitual entonces. Cuando llegó el momento de dar el salto al campo del profesionalismo tuve que dejar de competir unos años por falta de apoyo económico y de medios técnicos. Más tarde, cuando me planteé regresar a la competición decidí que era más adecuado hacerlo para competir en mountain bike.

¿Cómo puede hacer compatible su vida laboral, personal y la competición?

Hay que hacer un enorme esfuerzo para que sea compatible la vida personal, con el trabajo, los entrenamientos y la competición, especialmente esta temporada que estamos compitiendo con profesionales. Tenemos que trabajar duro y aprovechar mucho mejor el tiempo que nuestros rivales, que tienen la ventaja de dedicarse plenamente a entrenarse. Aprovechamos el tiempo que debería ser de descanso y de dedicación a la familia para trabajar.

Lo cierto es que salimos adelante gracias al esfuerzo constante y a la ilusión que pone cada día el magnífico equipo técnico que me apoya y que está totalmente comprometido con este proyecto. También es de agradecer la comprensión y el respaldo incondicional de la familia.

¿Cómo contribuye tu profesión, vinculada al mundo de la bicicleta, a tu mejora deportiva?

Trabajo en una tienda de ciclismo, que es mundo que me apasiona, lo que me permite estar todo el día rodeado de gente y de información vinculados a la bicicleta. Es una forma de estar todo el día motivado. 

Tenemos algunas dificultades para sacar horas de entrenamiento y para organizar los desplazamientos, pues esta campaña las competiciones son en lugares muy distantes, lo que nos obliga a ajustar muchos los viajes y a llegar con menos tiempo de descanso que los rivales y volver después de las competiciones.

¿Cómo has llegado al mundo profesional?

El proyecto empezó hace dos años cuando ganamos el mundial en la categoría master, que es la no profesional. Entonces los amigos y gente cercana empezaron a plantearme la posibilidad de dar un salto más y asumir un reto mucho mayor: entrar a competir en la categoría profesional. El pasado año empezamos a rodar y nos dimos cuenta que el equipo y yo nos amoldábamos muy bien a la categoría, a pesar de las dificultades. Después de un año de prueba hemos empezado esta competición mucho más adaptados y con mejores resultados.

¿Qué aportan las empresas que apoyan el proyecto como Ascensores Serki?

Esta temporada el calendario de competiciones es de ámbito nacional, lo que supone un notable incremento de los costes y del presupuesto necesario. Afortunadamente hay empresas comprometidas que les gusta el deporte y nos apoyan en este proyecto tan lleno de ilusión.

Personas que aman el deporte como Serafín Quiles, que además de patrocinador es un buen amigo personal, han apostado por este proyecto y gracias al apoyo de empresas como Serki hemos podido asumir el reto de una competición profesional tan exigente. El aumento de la dotación económica nos ha permitido contar con una persona que se encarga de la logística y nos asiste en carrera, además estamos trabajando de forma conjunta con el equipo de la empresa en la que trabajo.

¿Qué objetivos se han fijado para este campeonato?

Entrenamos con la ilusión de hacer el mejor papel, conseguir el mejor puesto y devolverles a los patrocinadores la confianza que han depositado en el proyecto mostrando sus marcas en toda España. De momento las cosas marchan bien: Nos hemos asentado mejor en la categoría, ocupamos la octava plaza en el ranking nacional en la categoría Pro, un gran puesto si tenemos en cuenta que estamos compitiendo con profesionales.

¿Qué le diría a las empresas que tienen posibilidades de patrocinar a deportistas no profesionales?

Creo que apoyar el deporte siempre es beneficioso y satisfactorio, principalmente por la labor social y por los valores de sacrificio, constantica y superación que transmite el mundo del deporte, pero también porque los deportistas nos esforzamos para que las marcas tengan visibilidad y reconocimiento allí donde vamos a competir.

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